El asesino de la maestra Alejandra Cugno – Lo acusan, entre otras cosas, de haber abusado sexualmente de una sobrina menor de edad y discapacitada. El procesado como autor penalmente responsable de rapto, seguido de homicidio doblemente calificado -por alevosía y criminis causa-, de la docente Alejandra Cugno, José Luis Baroni, ahora sumó otras dos nuevas y graves acusaciones en su contra, informaron fuentes judiciales.
Baroni, de 41 años, que en estos días se encuentra detenido en una comisaría de Sastre, luego de ser procesado por el juez de Instrucción José Manuel García Porta, por el brutal asesinato de la maestra de San Jorge, ahora fue imputado del supuesto abuso sexual de una sobrina menor de edad y discapacitada.
Fuentes tribunalicias indicaron que Baroni fue involucrado en ese hecho por su cuñada, y madre de la menor, quien al declarar ante los tribunales de San Jorge en el marco de las investigaciones del Caso Cugno, señaló a Baroni como autor de otro desagradable suceso que habría ocurrido hace mas de un año atrás en la localidad de Colonia Aldao.
El mencionado episodio no tomó trascendencia anteriormente porque la madre de la menor no quiso exponer a su hija y hasta se lo habría ocultado a su esposo, un ex boxeador muy conocido de la zona.
Pero en oportunidad de ser indagada por el juez Eladio García, sacó a relucir este nuevo delito que habría cometido Baroni, que ahora es investigado y sobre el cual será indagado en los próximos días.
Por otra parte, el fiscal de la ciudad de Rafaela, Carlos Stegmayer, lo denunció por uso de identidad falsa y falsificación de documento público, al exhibir en reiteradas ocasiones un DNI con su foto, pero con nombre diferente (Carlos Ferreyra) con el que habría sido protagonista de ilícitos en Buenos Aires, Córdoba y esta provincia.
Incluso, Baroni habría usado esa identidad falsa para formar una familia con una mujer de la zona rural, con la que tuvo hijos -indocumentados- y no los inscribió para no ser descubierto en sus andanzas.
Cabe destacar, que el tiempo que ocultó su verdadera identidad, coincide con el período de prescripción del primer caso que lo tuvo como protagonista, cuando en un proceder idéntico al utilizado en el caso Cugno, atacó a una remisera en Devoto, provincia de Córdoba.
En esa ocasión, el desenlace fue diferente ya que la mujer no murió, aunque fue brutalmente golpeada.
Finalmente, es de resaltar que la Justicia Federal de Santa Fe y Córdoba tomaron participación en este caso, ya que le corresponde a esa esfera tribunalicia.
Fuente: El Litoral – Edición: El Trébol Digital – Red de Medios
