Más y más arte – Lentamente comienza la cuenta regresiva del Encuentro de Escultores. Las obras ya tienen formas definitivas. Tras un jueves caluroso y soleado, nuevamente el arte dijo presente en la ciudad. Se cumplió el quinto día de trabajo por parte de los escultores con formas definidas y trabajos que comienzan a mostrar sus reflejos definitivos.
Carina Beltrame ya colocó los apliques en hierro en su obra de madera y lucen bellísimos. Adriana Sisto pule cada milímetro de sus «inmigrantes» con obsesión y Silva le colocó la cola al gran caballo que luce imponente en el sector oeste de la carpa.
Mercurio prometió ponerle nombre el viernes a su obra, Enrique Roncal enarbola un homenaje a los aborígenes de su Perú lejano, Rumié Barraza juega con la abstracción y lo estelar y Umpierrez le da definición a la cruz del sur.
Un poco más allá, Amurri pule detalles de los ojos del planeta en madera y Carloni le dio el toque que faltaba a su trilogía despareja.
El arte está presente en la ciudad, de día y de noche. Por la tarde o por la mañana. Con frío o calor. Con amenazas de tormenta y con soles agresivos.
Llega el viernes. Un día distinto. Un día para visitar. Si pasamos el plato principal, no podemos quedarnos sin el postre. Y más cuando se trata de arte.